Presentación de la Conferencia Inaugural «Dr. Alberto Martínez» de las III Jornadas de la ACST
Palabras del Presidente de la ACST, Académico Dr. Gabriel Orce.
Nuestro expositor para la Conferencia Inaugural es el Académico Dr. Antonio Horacio Toro Ocampo, quien expondrá sobre el tema “La salud pública de ayer, de hoy y de mañana, según la visión de la Academia de Medicina”.
Intentaré dar una breve semblanza de la carrera y la personalidad del Dr. Toro Ocampo, sabiendo de antemano que no le haré justicia en el breve tiempo de esta presentación.
El Dr. Toro Ocampo se recibió de Médico en la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), en La Paz, y se dedicó a la Ginecoobstetricia. Se orientó hacia la Salud Pública y realizó dos Maestrías en ese campo: la primera en Salud Pública, con dedicación en el área materno-infantil, en Puerto Rico, y la segunda, en dirección y gestión de bienestar social y servicios sociales, en Alcalá, España.
Su experiencia y conocimiento en esas áreas lo llevaron a formar parte del equipo de expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), desde donde aplicó sus conocimientos en políticas y programas de población y salud reproductiva en beneficio de casi 20 países, como Chile, Paraguay, Brasil, Panamá, Costa Rica, Cuba, México y otros.
Su formación y experiencia lo llevaron, en 1979, a ocupar el cargo de Jefe Nacional de Salud de la Mujer y, en 1982, a ser designado Director Nacional de Salud del Ministerio de Salud de Bolivia.
En 1982 el Dr. Toro Ocampo fue invitado por la OPS para trabajar como Gerente del estudio de mortalidad en la infancia. En 1985 fue designado Consultor en Salud materno infantil en Ecuador y en 1987 asumió el mismo cargo en Brasil, donde, en 1988, fue condecorado con la medalla de la Academia de Pediatría. Recibió también otros reconocimientos, y una condecoración honorífica en El Salvador. En 2001 y 2002, la OPS/OMS lo nombró el Mejor Gerente de la Región de las Américas de ese año.
Su trabajo lo llevó a salir de Bolivia por más de 20 años, pero decidió regresar para, en sus palabras, «devolver todo lo que recibió”.
Más recientemente, fue admitido como Miembro de Número en la Academia Nacional de Ciencias de Bolivia (ANCB), en octubre de 2015, ocasión en que presentó su trabajo “Determinantes sociológicos y antropológicos de la pérdida reproductiva”, que describía resultados de un estudio que incluía más de 170000 embarazos en toda Bolivia y describía la pérdida de vidas asociada al proceso reproductivo humano desde el embarazo hasta la primera semana de vida.
Fue también elegido, y recientemente reelegido, Presidente de la Academia Boliviana de Medicina, desde la cual transmitió su experiencia, conocimiento y valores éticos a las nuevas generaciones de galenos y a las autoridades de salud de Bolivia.
Es actualmente el Presidente de la Junta Directiva de la ALANAM, la Asociación de Academias Nacionales de Medicina de Latinoamérica, España y Portugal, que nuclea 15 Academias Nacionales de Medicina.
El Dr. Toro Ocampo ha continuado siendo miembro de numerosas asociaciones científicas, asesor de OPS/OMS y Responsable Coordinador de esas instituciones en el MERCOSUR y otras organizaciones internacionales, así como también Miembro del Grupo de Expertos Internacionales en Salud, filial Bolivia (GHIA).
Es autor de varios libros y numerosos trabajos, en los que cubre no sólo los aspectos técnicos y profesionales de la Medicina sino, en forma prominente, la orientación humanística que el ejercicio de la profesión debe tener, al igual que toda profesión relacionada con el mantenimiento de la vida y la salud.
En algún momento le fue preguntado qué era ser académico. Su respuesta fue simple:
“¿Qué significa ser académico? Tener un conocimiento y saber de la vida y ponerlo a disposición de las nuevas generaciones”, señala el Dr. Toro Ocampo.
Creo que en esa respuesta, en el decidido apego a la ética y en la noción de la necesidad de los profesionales de “devolver lo recibido” anida buena parte del espíritu que debe guiar a nuestra joven Academia, para beneficio de nuestras comunidades.
Sin más, invito al Académico Dr. Toro Ocampo a dictar su conferencia.